miércoles, 3 de septiembre de 2008

Tiempo de silencio

El joven aspirante a médico experimentaba las noches en vela con ratones un sueño irrealizable para huir de los días del hambre. Hoy, mientras la mitad del mundo se muere de hambre y la otra de indigestión, lo que se sufre casi por igual es la soledad humana.
Leo que en Japón un tercio de la población vive sola. Y para paliar esa soledad, surgen en la ciudad cafés llenos de gatos. Gatitos mansos perfectamente domesticados ofrecen compañía a los hombres solos y a las mujeres solas, como un reclamo más al servicio del mercado del mundo al revés.
Poco a poco el ser humano va siendo menos humano consigo mismo y con lo que le rodea, que utiliza sin escrúpulos como tabla de salvación para no caer del todo. “De nada servirán las pastillas cuando todos padezcamos la depresión”, venía a decir uno de los chavales de Los Edukadores, antes de poner en las casas de los ricos mensajes como “tienes demasiado dinero” y “tus días de abundancia están contados”… Una película que tantos diálogos nos ofrece sobre nuestros modos de vida. En Wall-e, la civilización que durante años compró todas las mentiras que nos ofrece el sistema a un precio módico (ya sea en su frente de bienes de consumo como en el de los bienes de la desinformación y la incultura) acabó tragándose la peor de todas: que la vida es una mentira, y siempre ha sido así porque el confort es vivir en una cápsula, dejándose llevar sentado en la máquina, engordando y sin cuestionarse el viento que otros soplan para traernos a cuentagotas deseo dosificado en cómodos plazos.
Y en estos días de derrumbe y de final de un falso sueño, donde parece que no es tiempo para el amor, recuerdo La haine, y la frase de Kassovitz “esta es la historia de una sociedad que se derrumba, y que mientras va cayendo, no para de repetirse: “hasta ahora todo va bien, hasta ahora todo va bien”. Y eso me lleva a la hermosa letra que nos escribió Giusepe para recordar a los dos menores de Toulouse que, huyendo de la brutalidad policial, se escondieron en un generador eléctrico y se electrocutaron dentro… aquella tragedia de los marginados dio lugar a las revueltas de los suburbios que durante meses llenó de ira y de llamas las noches de la periferia parisina:

“Un tipo cae de lo alto de un tejado y piensa: por ahora todo va, por ahora, todo… la periferia gira, pero en el centro el movimiento es sordo, mundo de sordos. Tras cada esquina hay chispas que quieren saltar, tras cada instinto un perro quiere morder. Salta la valla del mundo al revés, se electrocuta el barro de que están hechos tus pies…
Y en los días sin voz el odio se nos agarró dentro. Y en las noches sin luz otros coches ardían dentro de nuestro corazón. Se consume la mecha del abandono en el cemento, donde cuaja la desigualdad…
Sigue cayendo, y el tipo anula sus sentidos: “por ahora todo va, por ahora todo…” Que esto es volar lo tenías tan asumido…, que no es del todo cierto, ¿quién te lo va a contar? Y el sordo mira hacia dentro en su ombligo y devora su 4% TAE, y nota el movimiento de la acera que se calienta bajo sus pies, y surgen periodistas y todos conocen las causas de la situación. Hablan de revueltas después de tantas vueltas dadas sin respiración…”


(la foto, de las txosnas de Bilbo' 08, aparece por cortesía de Andoni)

Y por eso, ahora que en unos días se cumplirán dos meses del día en que puse un contador en el blog y veo que me encontraré registradas casi 500 visitas desde uno y otro lado del Atlántico, os agradezco a todas las personas que caéis por aquí, ya sea por gusto o por tropiezo, por formar parte de estos 500 antídotos silenciosos contra la soledad. Ella sigue estando en el horizonte, y así será siempre. Pero lo que está claro es que, al revés del mundo, ella cada día está menos sola. Y así será siempre.

4 comentarios:

ada dijo...

Pues ya sabes que aquí tienes a una leal visitante a tu blog :) Hay que ver lo bien que escribes...en serio, es una mezcla entre poesía y periodismo social...atómico!!

Corren malos tiempos...mira que intento ser positiva con todo lo que ocurre a nuestro alrededor...pero cada día sueño más con un huerto y tres o cuatro churumbeles correteando entre tomates y pepinos antes que criarlos sobre el asfalto capitalista, consumista e inhumano en el que estamos convirtiendo nuestro mundo...uf, corren malos tiempos hasta para ser positiva...

Bxuss!!
ada

igor dijo...

...pues yo te doy un millón de gracias x pasarte y mucho más por los piropos que dejas escritos por este blog atómico ;) pero eso sí, nunca hay que perder la rabia positiva para entender el mundo... que vivan los huertos y los churumbeles libres!!

bexuss!!

Beatriz Montero dijo...

Y de momento todo va. No tengo claro si estamos dentro de una bolsa a punto de reventar o si nos hundimos en una depresión. Lo que sé es que vamos, aunque no sepa hacia dónde.

Y gracias por dejarnos oír tu voz.

igor dijo...

Vamos, que no es poco!!
:)

Quizá hoy lo más necesario sea eso, Bea, ser capaces cada un@ de nosotr@s de dirigir su barco... aunque nos estrellemos, pero que seamos nosotr@s quienes demos los pasos...

gracias a ti siempre por venir!
beso!