martes, 21 de abril de 2009

Entre pólvora y magnolias

Es ya todo un mito para la literatura vasca. Joseba Sarrionandia, Sarri, filólogo y maestro, nació en el pueblito vizcaíno de Iurreta en abril de 1958. Desde muy joven participó en círculos literarios, y formó parte de Pott, una banda de escritores entre los que se encontraban Bernardo Atxaga y Ruper Ordorika, y que funcionaban bajo consignas como "contra el consumo, creación". En 1980, con 22 años de edad, le condenan a 28 años de cárcel por pertenecer a ETA. Ese mismo año, ya preso, gana tres premios literarios por sus poemas y cuentos. La cárcel no consigue amedrentar su creatividad, así que él nunca abandona su vocación literaria.

En los sanfermines de 1985 organizan en la prisión de Martutene un concierto en el que actúa el cantautor Imanol. Sarri escapa de la prisión donostiarra escondido en los bafles del concierto.
Y desde entonces, desde hace casi 25 años, vive fugitivo en algún lugar de su mundo apátrida, sin dejar de crear en ningún momento desde su paradero desconocido. En 2001 recibió el Premio Nacional de la Crítica de narrativa en euskera.

Este poema, sangrante contradicción entre el arte y la trinchera, figura entre las antologías de la poesía vasca contemporánea:

Literatura y revolución
Cuando el comisario Ángel Martínez mete el cañón de su revólver en el ano del detenido y la mirilla sale sucia, ensangrentada, patética, ¿qué le importa al muchacho torturado si el poeta es un fingidor?

¿Ha visitado G. K. Chesterton alguna vez La Salve?

¿Quién conoce en los calabozos de Intxaurrondo a Hermann Broch?

¿Cómo explicará el muchacho torturado al llegar destrozado frente al juez
el significado exacto del concepto objetive correlative?

¿Qué es el amanecer lleno de agujas de Carabanchel para Molly Bloom?

¿Quién es Michel Foucault para quien se consume durante diez meses en celdas de castigo? ¿Una visita de cinco minutos? ¿Un encuentro lírico?

¿Deberían los presos vascos estudiar la Biblia de Jean Duvoisin para aprender a poner las haches y comas correctamente?

¿Cuál es para la literatura el valor ético inextinguible de la rebeldía, la revolución, la aventura?

¿Qué se escribe al margen de revistas como Voprosi Literaturi o Tel Quel sobre las huelgas de hambre interminables de los presos vascos?

¿Qué le importa el compromiso al muchacho que –como una bandera revolucionaria, sin escudo– huye de los tiros de la policía?

(Traducción de Maite Mujika)

jueves, 16 de abril de 2009

Nosotr@s y la calle



"En la calle, un joven ha muerto por sobredosis,
atracos..., un atentado terrorista...
Todo, todo
está en los periódicos
hasta que te atrape
a ti también...

Tú, maldito burgués,
nunca entenderás nada,
porque para ti
lo que ocurre en la calle
siempre son problemas de los demás".


La crisis económica trae de la mano el auge del fascismo paseándose por nuestras calles. Como ha ocurrido siempre, cuando la mano invisible abre la brecha entre las clases sociales y ni el aparato policial ni los garantes de la paz social (todos ellos funcionarios del Estado) cumplen ya con eficiencia su tarea de adormilar conciencias, se deja hacer a los verdaderos dóbermans que descansan a los pies del sistema, bien sujetos con su correa de la mano del amo, esperando su oportunidad para saltar sobre su presa.

Allá donde hay quien les plante cara, los disturbios y las hogueras latentes dejan escrito el poema urbano de la resistencia...

Proliferan por la red, también, las noticias que evidencian la relación entre los cuerpos policiales y la extrema derecha (agresiones policiales a inmigrantes o a jóvenes de centros sociales en Vizcaya, Guadalajara o Madrid, desde donde hoy se hace público un espeluznante vídeo en el que se grabó a la policía nacional en repetidas ocasiones pasando al lado de una casa para llamar "guarros" a quienes allí viven y allí crean, días despues de sufrir varios ataques incendiarios de los que nunca se supo)...

La calle va siendo un lugar menos habitable por el demonio de la exclusión social, condición indispensable para que el capitalismo funcione con su mano de obra barata..., con su división internacional del trabajo..., con su división de género de las labores domésticas... Y por supuesto, con su división de clase, la más importante, que hace creer a quienes llevan una vida tranquila que los problemas de la calle siempre son cosas de los demás: cosas de los "antisistema" que se enfrentan al dóberman o a los G7, G8 o G20...; cosas de los sin escuela decente o sin atención sanitaria, servicios robados por las arpías que alimentan el monstruo financiero con la condescendencia de aquel nuevo sujeto apolítico llamado "ciudadanía"; cosas de los yonkis que consumen el basuco que introdujo la mano negra del Estado en la barriada; o de los jóvenes en condiciones de pelear, que consumen las drogas que los consumen y los evaden y consiguen anular su rabia; cosas de los sin papá y sin mamá, los sin infancia; los sin techo y sin hipoteca, los sin papeles, los sin amor propio...; cosas de los emigrados de sí mismos, los alcohólicos, los deprimidos, los que lo perdieron todo, los que no valen nada en el mercado de valores...
No caen en la cuenta de que en este sistema la prosperidad era un engaño más.
Y así será siempre.
Hasta que te atrape a ti también.

miércoles, 8 de abril de 2009

Negra sombra



La memoria nocturna está llena de poemas. Y me vinieron en la noche, desde aquel cajón, algunos versos. Atxaga habla del mal carpintero, que para dar un golpe en el clavo, antes golpea todo el resto de la madera.

Y vino también, en una canción a Rosalía, el olor de una tierra abrasada por el progreso y el egoísmo, por las mareas negras y los incendios, por la avaricia del urbanismo... y donde la respuesta social no tardó en sufrir, como estamos ya acostumbrados, la criminalización... pero aún así, existe, y resiste, viva, Galiza.

Cando penso que te fuches,
negra sombra que me asombras,
ó pé dos meus cabezales
tornas facéndome mofa.

Cando maxino que es ida,
no mesmo sol te me amostras,
i eres a estrela que brila,
i eres o vento que zoa.

Si cantan, es ti que cantas,
si choran, es ti que choras,
i es o marmurio do río
i es a noite i es a aurora.

En todo estás e ti es todo,
pra min i en min mesma moras,
nin me deixarás ti nunca,
sombra que sempre me asombras.

martes, 7 de abril de 2009

Soy un etarra



Aunque públicamente me haya esforzado por denunciar a los cuatro vientos que no la quiero ni la defiendo porque atenta y arrasa, sobre todo y antes que a nada ni a nadie, contra las luchas populares.
Aunque públicamente haya exigido que quite sus sucias manos de los movimientos populares… y que quite, especialmente, sus sucias manos de la lucha anti TAV.
Pero resulta que soy yo quien cometo el delito de compartir la lucha anti TAV (contra lo que está ETA también, aunque no sean las mismas razones que las mías, pero eso le da igual al señor juez).

Hoy ya no son los propios militantes quienes anuncian su pertenencia o no a ETA, sino la Audiencia Nacional, la formadora de terroristas por excelencia, porque tiene en su poder el milagro de multiplicarlos.

Según la prensa española, para Garzón está comprobado que la plataforma AHT Gelditu ("parar el Tren de Alta Velocidad") forma parte del complejo de ETA, porque uno de los detenidos estos últimos días era integrante de Segi y pertenecía a una asamblea anti TAV y organizaba manifestaciones en su pueblo contra el TAV y ¡hasta participaba en ellas!
Se le acusaba también (con letra pequeña, curiosamente) de haber participado en el sabotaje de una máquina (que nunca reivindicó ETA, por otro lado). Y digo yo, si uno participa en un sabotaje de los que se han cometido toda la vida... ¿por qué se criminaliza una idea y un movimiento y se le pone el sello de lo que al juez le sale de los huevos? En otro caso más rocambolesco, según ABC, "otro de los arrestados, Mikel García, también integra la asamblea de Gelditu y, en concreto, también se le intervino propaganda contra la «Y» vasca". (Prueba más que suficiente para demostrar que ETA es como Dios y está en todas partes.)

La plataforma anti TAV está formada por movimientos sociales de todo tipo y, sobre todo, por una preocupación absolutamente lícita y legítima por proteger el medio ambiente para las generaciones futuras, desde quienes nos resistimos a creer que las vacas comen cemento. Por hacer las cosas de otra manera y no pensar con la cartera, como los que tienen el corazón lleno de hormigón y eurodólares. Y sobre todo porque no vengan las cosas impuestas, porque el proyecto de llevar a cabo la mayor obra pública de la historia vasca se decidió en un despacho sin preguntar a nadie, y nadie lo ha elegido democráticamente, aunque lo paguemos entre todas. Y frente a eso, no sólo cierran toda posibilidad de debate social, sino que, como se ha hecho público recientemente en un informe de la Ertzaintza, se da la orden de tomar cualquier actividad de denuncia anti TAV como un acto de terrorismo.

Si esa doctrina de perseguir a un periódico, a una editorial, a un grupo político o cultural o al proyecto que sea porque uno o varios de sus miembros hayan cometido delitos, se aplicara a todo el mundo, ¿quedaría algún partido o movimiento en pie? Pienso en la prensa cavernícola, en las hinchadas del fútbol, en los grupos ProVida, el Opus Dei..., los cuerpos de seguridad del Estado... y hasta el PP y el PSOE, que en eso de poner cabezas de turco a disposición del juez sacaron siempre sobresaliente.

La letra de Fermin, sobre la melodía de una canción tradicional, dice:
"Porque nos gusta el tren
Parar el Tren de Alta Velocidad,
Para mejorar el camino de hierro
Parar el TAV
Para, para, parar el TAV
¿Lo habéis entendido?
Parar el TAV...

Si existen alternativas
Parar el TAV
¿Por qué un modelo destructivo?
Parar el TAV
Para, para, parar el TAV
¿Lo habéis entendido?
Parar el TAV...

El tren siempre nos ha inspirado
Parar el TAV
Éste sin embargo, nos jode vivos
Parar el TAV
Para, para, parar el TAV
¿Lo habéis entendido?
Parar el TAV...

Si no lo quieren en Canadá
Parar el TAV
Ni en Dinamarca, ni siquiera en Austria
Parar el TAV
Para, para, parar el TAV
¿Lo habéis entendido?
Parar el TAV...

Porque nos encanta el tren
Parar el TAV
Para mejorar la red ferroviaria
Parar el TAV
Para, para, parar el TAV
¿Lo habéis entendido?
Parar el TAV..."

Aquí dos vídeos: uno explicando la lucha de la plataforma anti TAV, y otro de 2007 sobre el avance de las obras del TAV.
Atención: no lo veas con el corazón, porque lo mismo te convence y tú mism@, sin saberlo, pasas a pertenecer también a ETA.